Ayer los erizos conocieron a una nueva amiga, la letra i minúscula. Esta letra vive en el País de los Sabios (donde viven todas las letras del abecedario) en una casita que comparte con sus cuatro hermanas: la a, la e, la o y la u.
Como sus hermanas la llamaban la pequeñita, la letra i quería llevar un sombrero en la cabeza con el que parecer más alta. Buscó por todo el País de los Sabios sin encontrar un sombrero apropiado. Cuando se hizo de noche miró por la ventana de su casita y al ver el cielo lleno de estrellas se le ocurrió que una de ellas podría ser un excelente sombrero para su cabeza. Al día siguiente, se acercó a los pajaritos que en el patio del colegio se comían las miguitas que se les habían caído a los niños de sus bocadillos y se subió al que le pareció más fuerte.
Cuando el pájaro empezó a volar notó que sus alas eran más pesadas que de costumbre y al mirar hacia atrás vio a la letra i, que se agarraba muy fuerte a sus plumas. La letra i le pidió perdón por haberse subido sin su permiso, le contó su historia y le preguntó si podría llevarla a casa de la luna para pedirle una estrella.
Y así fue como el pajarito llevó a la letra i hasta la puerta de la casa de la mismísima luna. Cuando la luna escuchó la historia de la pequeña i enseguida salió al cielo nocturno, cogió la estrella más brillante que encontró y se la puso encima a la letra i.
Al llegar a casa, las demás vocales felicitaron a su hermanita por su nuevo aspecto, aplaudieron y le dieron grandes abrazos. Y, desde entonces, para hacer la letra i, todos los niños del cole cantan esta canción:
"Subo y bajo por la i chiquita sin olvidarme de su manita. Y en la cabeza le pongo una estrellita".
Después de escuchar esta historia, hicimos una ficha en la que decoramos la I mayúscula y la i minúscula con bolitas de papel seda. Aquí tenéis algunas fotos del gran trabajo que hicimos.
Pero eso fue ayer, hoy hemos tenido nuevas emociones. Esta mañana Paula nos ha traído un amigo nuevo para Pablo, es un macho de color azul que también se llama Pablo. Al principio a algunos amigos les ha parecido que no podía ser que se llamara Pablo, pero luego nos hemos dado cuenta de que los nombres se repiten y de que conocemos varias Dianas, Aitanas, Cristinas, Pedros y Jaimes, así que no hay problema.
Además, Lyny nos ha traído un libro en el que hemos podido ver fotos de erizos y de otros animales que viven en los bosques. También nos ha traído un dibujo gigante de un erizo. Aquí podéis ver las fotos de cómo está quedando el rinconcito de Pablo y su pandilla.
Otra cosa importante que ha pasado hoy es que, como somos muuuuy mayores, hemos empezado los libros de letras. Hemos aprendido dónde vamos a guardarlos, cómo hay que pasar las páginas para que no se arruguen las que se quedan abajo, que la espiral que sujeta las hojas siempre tiene que estar arriba y que en una esquinita de abajo está escrito el número de la página. Y todos a la vez hemos hecho ni más ni menos que dos fichas de reconocimiento de la letra i.
¡ESTAMOS HECHOS UNOS CAMPEONES!
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